Meses de espera se hicieron agua porque finalmente el día llegó y desde las 6:30 de la mañana del viernes, el Aeropuerto Internacional de Monterrey fue testigo de cómo cientos de adolescentes llegaron, poco a poco, con la esperanza de recibir personalmente a Los Jonas Brothers.Las horas fueron pasando y la desesperación se incrementaba, al mismo tiempo que pancartas, pósters y fotos iban tapizando cada rincón del lugar. Los papás cansados observaban la emoción de sus hijas por sentir a Kevin, Joe y Nick cada vez más cerca. Eran las 10 de la mañana y un convoy de cuatro camionetas, junto con cinco elementos de tránsito local ingresaron a los hangares privados del Aeropuerto, por lo que los gritos no se hicieron esperar.
Fueron aproximadamente 40 minutos los que tuvieron que pasar para que los músicos y su equipo de trabajo terminaran con los trámites correspondientes y pudieran comenzar su camino.
Las camionetas fueron saliendo una a una y las fanáticas no lo podían creer, eran los tres hermanos Jonas, quienes bajaron el vidrio y las saludaron; y por si fuera poco, bajaron de las camionetas y compartieron sonrisas, autógrafos, abrazos y hasta besos con algunas de ellas. El trayecto inició y la velocidad se incrementó cuando los “Brothers” fueron interceptados por los medios de comunicación. A más de 160 kilómetros por hora, el convoy transitó por la carretera internacional y los elementos de seguridad fueron tapando el camino para evitar que las cámaras pudieran captar a los cantantes.
